La administración tiene que pagar más de un millón de euros para la financiación de las guarderías en los cursos 2012-2013, 2013-2014 y 2014 a 2015.
El fallo condena a la Generalitat a pagar 2.358.200 euros al consistorios en deuda por los cursos de 2012 a 2015.
El objetivo del proyecto es que las guarderías municipales se conviertan también un servicio con capacidad de ofrecer oportunidades para el trabajo en inclusión educativa.
La empresa afiliada al grupo INIPRO debe el 60% de la nómina del mes pasado a las trabajadoras, que temen que esto vuelva a suceder, por lo que ya están planeando una huelga.