Estas promociones forman parte de la tercera convocatoria del Programa de alquiler asequible promovido con el objetivo de dar un nuevo impulso al parque de vivienda pública de la Generalitat.
Las dos ciudades ven como se incrementan sus precios incluso por encima de Barcelona y del resto de capitales catalanas a excepción de Girona.
Tras dos años inactiva y con la escasa disposición de parque público de vivienda de alquiler, apenas 75 pisos, los retos de la entidad son: la poca oferta de vivienda de alquiler y de protección oficial, y la desprotección legal que sufren los inquilinos.
'Qui mou els fils a Gavà?' Esa es la interrogación directa y sospechosa que aparece en unos papeles amarillos repartidos por el centro de la ciudad. ¿Qué hay detrás de estos carteles?
En total, el ayuntamiento y la empresa municipal Promunsa ofrecen 20 pisos de alquiler a menores de 35 años y familias monoparentales y hasta 43 de protección oficial para su compra.
La entidad sacará a concurso antes de verano el 50% de la empresa Habitatge Metropolis Barcelona y ya ha empezado a transferir propiedades a esta compañía, una de ellas en Sant Boi de Llobregat.
El ayuntamiento del municipio ha reprochado al Ejecutivo que el nuevo proyecto "no garantiza el derecho de la ciudadanía a una vivienda digna".
El Institut Metropolità de Promoció de Sòl i Gestió Patrimonial (IMPSOL) construirá 130 viviendas de las cuales 70 se ofrecerán en régimen de alquiler público.
En cifras absolutas este porcentaje supone que 300.000 personas en el área metropolitana de Barcelona tienen un sobreesfuerzo a causa del pago del arrendamiento.
De los 10 municipios de toda España que más incrementan el precio del alquiler en los últimos cuatro años, nueve de ellos se encuentran en Cataluña y cinco de ellos son del Baix Llobregat.
Según ha informado el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB), organizador del evento, en la edición de este año se ha incrementado la participación de expositores y patrocinadores.
En una época en la que el precio de la vivienda se encarece más rapido de lo que se enriquece la población, el AMB y el Ayuntamiento de Barcelona quieren construir y explotar viviendas asequibles.
La formación de izquierdas denuncia que el precio ha subido en unos 50 euros de media, aproximadamente, desde 2015, situándose en los 572,27.