Los trabajos a contratar incluyen actuaciones programadas de substitución de planchas y tubos de fibrocemento que se hayan localizado en estaciones.
El trabajo se ha previsto en dos lotes, el primero incluye 24 trenes de la serie 3000 (Línea 1) y 15 trenes de la 2.100 (Línea 4) mientras que el segundo lote consta de 18 trenes de la serie 400 y seis trenes de la 2000 (Línea 3).
La empresa dice estar temiendo que no se pueda atender la demanda normal, especialmente en las cuatro horas de la mañana y de la tarde.
Ultiman la convocatoria de paros para decidir cuándo y cómo llevarlos a cabo. Hay dos propuestas -una del comité de empresa y otra surgida de la asamblea-, que ya se han votado.
La dirección ha llegado a calificar la actitud de los sindicatos de "irresponsable y desleal" por denunciar ante la opinión pública la muerte de un trabajador jubilado por exposición al amianto.
TMB ha detectado 20 casos de alteraciones pleurales entre sus empleados posiblemente relacionadas con la exposición al amianto, que no requieren tratamiento médico.
El ente quiere sustituir la totalidad de las series 3000 y 4000, que constituyen la mayoría del material rodante de las líneas 1 y 3, donde más presencia de fibrocemento hay.
Adhesivos y carteles son la nueva solución del ente para señalizar las ubicaciones en las que se detecta algún material con asbesto en la red.
La CGT ha acusado a TMB de haber ocultado que estaban trabajando con amianto y de mentir sobre los empleados que han enfermado por esta causa.
La inicitiva consiste en un vídeo que se lanza por redes sociales y se emite a través de los canales de televisión de metro y autobus y una campaña radiofónica.
El sindicato ha recordado que los 12 afectados sufren manifestaciones benignas de la exposición al amianto "que hasta hace pocos meses la empresa negaba".
Transports Metropolitans alerta de que "teniendo en cuenta que entre el 3% y el 14% de las personas expuestas al amianto presentan manifestaciones pleurales, es previsible que la cifra de casos aumente en los próximos meses".
Las revisiones que viene realizando TMB a sus trabajadores desde que se advirtió de la presencia de amianto en el subsuelo de la ciudad han detectado afectaciones a cinco empleados.
La empresa pública aísla las planchas de fibrocemento que cubren los andenes de la estación de Verneda.
La entidad metropolitana asegura que se encuentra en una baja proporción y bien conservado, por lo que no representa ningún peligro para los usuarios ni empleados.
Además, se ha ofrecido al resto de la plantilla de Metro la posibilidad de acogerse a una campaña especial de detección de enfermedades respiratorias.
Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) ha elevado a 49 los trenes afectados y mantiene su postura de no retirarlos alegando una falta de riesgo de contaminación, puesta en duda.
La unificación tarifaria afectará a los desplazamientos con origen y destinación a cualquier de las estaciones ferroviarias y paradas de autobús de los 36 municipios.
Los abogados aseguran que se trata de una "grave irresponsabilidad".
La entidad se justifica diciendo que estos trenes que circula por las líneas 1 y 5 de metro y que tienen pinturas que contienen derivados del amianto no desprenden partículas contaminantes.