Dos elecciones en el aire ¿por la Covid?

Estos días, algunos partidos proponen aplazar las elecciones en Catalunya. El motivo, según ellos, es la pandemia sanitaria que sigue haciendo estragos y ahora más con el repunte, por culpa de aquellas personas irresponsable e insolidarias que se ponen las recomendaciones de los expertos por montera y las consecuencias las pagan también otros que no tienen la culpa.

La decisión final de aplazar los comicios es competencia de la Generalitat, aunque el consenso entre las fuerzas que concurren debería tenerse en cuenta. Claro que poner de acuerdo a todos es imposible. Los partidos están pendientes de las encuestas, si les son favorables o no, y en función de eso decidirán. Eso es así. Con lo cual, la unanimidad no está garantizada. Solo queda esperar a este viernes para conocer la decisión que ha prometido el govern bipartito.

Resulta chocante que en temas importantes que afectan a la ciudadanía no hay manera de que los protagonistas, los políticos, dejen aparcados los intereses partidistas para ir juntos a buscar soluciones en tiempos de crisis como la que se está viviendo. No hay manera, ni tiene pinta de que algún día lo hagan, para desgracia de las personas que cada vez están más desencantadas con ellos.

Mientras, la vida del gobierno catalán sigue haciendo lo que puede -¿o quiere?- para poner parches en las consecuencias de la Covid: ERTES, ERES, cierres de empresas, de comercios. Cada día hay más personas con necesidades básicas, como es no tener ningún recurso para mantener a sus familias, que tienen que acudir a los servicios sociales, bancos de alimentos, Cáritas, Cruz Roja o a la solidaridad de otros colectivos. Cuando se llega a estas situaciones, las administraciones deben cambiar sus prioridades y no continuar algunos proyectos que pueden dejarse para más adelante. Es el caso de la “Nasa” catalana. Este martes, la portavoz del Govern anunciaba que se había aprobado el anteproyecto de Ley de la creación de la Agencia Espacial de Catalunya, como si Catalunya no tuviera en estos momentos cosas más importantes en las que entretenerse y dedicar ese dinero a las necesidades reales de ahora. Ante esta situación, a unos les ha dado un ataque de risa y a otros le han entrado un cabreo monumental. ¿Pero toca ahora dedicar tiempo y dinero a la Nasa Catalana? Más bien, no. Claro, como hay un gobierno bipartito que tiene problemas internos, no se entiende y cuando uno de ellos dice A, el otro replica que B. Así no se puede seguir.

Con esos de los cambios de criterio, nos viene a la memoria la actitud del Govern con el Barça, cuando el presidente Bartomeu, ante la moción de censura contra él y su junta directiva, presentada por Jordi Farre -quien por cierto, no ha conseguido los avales suficientes para ser candidato- pidió a la Generalitat que pospusiera unas semanas las votaciones para organizar mejor los sistemas de votación con el fin de garantizar las medidas de seguridad por la Covid. No hubo manera de llegar a un acuerdo. Ante esta situación, Bartomeu y su junta presentaron su dimisión, no sin antes enviarles algunos dardos: “pidieron cobertura legal, la misma que ellos solicitaron al Gobierno central para el toque de queda, pero han optado por no darnos lo que ellos requerían al Gobierno y han decidido lavarse las mano”. Ahora con los cuatro candidatos que optan a la presidencia, la Generalitat se plantea aplazar también las elecciones del Barça... No tiene prisa en que se celebren. Algunos candidatos están de acuerdo y otros no. ¿Por qué? Pues por lo de siempre: las encuestas, que a unos les dan mejores resultados que a otros. Es la misma estrategia, a quienes les dan más, como a Laporta, quieren elecciones ya, y los que no, quieren ganar tiempo. Dos elecciones en el aire con un denominador común: los datos de las encuestas. Solo faltan unas horas para tener la respuesta…