El hombre acumulaba un largo historial delictivo con varios antecedentes por delitos considerados graves por la Policía Nacional, que lo calificó como “una amenaza real, grave e inminente para la seguridad ciudadana”
Cumplió el mandato judicial, pero no se resistió a delinquir de nuevo, en un municipio que no estaba en su lista y, por lo tanto, dormirá una temporada en la prisión.