Todo ello no tiene otra finalidad más que garantizar la seguridad en las carreteras, contribuir a una disminución de las muertes víctimas de accidentes de tráfico y dañar lo menos posible el planeta.Es por esta razón que la inspección es cada vez más estricta y en el año 2018 se incorporó una nueva medida que tenía por objetivo reducir las emisiones.
