​Vecinos del Prat logran, dos años después, que el Ayuntamiento paralice una obra llena de irregularidades

Han tenido que pasar varios años de intensa lucha vecinal para que el Ayuntamiento del Prat de Llobregat ordenara la paralización de la construcción de un edificio de viviendas que no cumple con la normativa vigente sobre este tipo de construcciones y que incumple el propio proyecto de la obra.

Se trata de un edificio en construcción en la calle Enric Morera. Nada más iniciarse las obras, los vecinos percibieron que se estaba incumpliendo con la normativa. Conforme estás fueron avanzando, los incumplimientos eran mayores, al punto que llegaban a afectar a las viviendas aledañas, y las molestias para los vecinos llegaron a hacerse insoportables.

Los vecinos llevaron sus quejas al departamento de Urbanismo del Ayuntamiento, que en aquel entonces dirigía la concejal Alba Bou Jordà. Su sorpresa fue que cuando empezaron a indagar sobre el asunto se percataron de que la licencia de obras había sido concedida a una promotora cuyo administrador único que tiene parentesco con esa concejal.

Las quejas que los vecinos presentaron ante el Ayuntamiento fueran cayendo en saco roto y el consistorio daba largas a sus reclamaciones mientras la obra seguía avanzando y las irregularidades eran cada vez más evidentes. Las irregularidades afectan tanto a la altura como a la anchura del edificio, que también incumple la normativa antiincendios de las medianeras y se ha construido una vivienda en el piso superior que no consta en el permiso de obras, además de que se han abierto ventanas en lugares en los que tampoco se podían abrir.

Ante las insistentes reclamaciones de los vecinos, los técnicos del consistorio realizaron algunas inspecciones, detectando algunas irregularidades, y otras no, pero permitiendo la continuidad de las obras.

La pasividad del consistorio llevó a los vecinos de la zona a presentar nuevas reclamaciones, una de ellas ante la Oficina Antifraude. Fue entonces cuando el Ayuntamiento llevó a cabo una nueva inspeccionó de las obras y corroboró que la práctica totalidad de las deficiencias denunciadas por los vecinos de la zona existían, por lo que ordenó, esta vez sí, la paralización provisional de las obras a la espera de que la empresa promotora dé su versión de los hechos y corrija las deficiencias detectadas.

Lionel Ribera, portavoz de los vecinos afectados, asegura que han tenido que llevar a cabo "varias denuncias ante el departamento de Urbanismo del Ayuntamiento para que nos hagan caso, aunque al principio siempre nos daban largas y permitían la continuidad de las obras. Incluso legarona  decirnos que una de las irregularidades no la podían comprobar ya que estaba tapada, pese a que nosotros les habíamos presentado unas fotos en las que se veía perfectamente que lo habían hecho de manera ilegal".

Por ello sospecharon que la relación de parentesco entre la anterior concejal de Urbanismo del Ayuntamiento y el administrador único de la promotora pudo influir en la forma en que desde el consistorio estuvieron rechazando sus peticiones de paralización de las obras durante más de dos años. Así lo hicieron constar en su denuncia a Antifraude los vecinos destacan que "Alba Bou Jordà (prima del administrador único de la promotora) estuvo al frente de Urbanismo desde el 2016 (año que se tramita la licencia para dicha obra) hasta mediados de 2019. Alba Bou Jordá desempeña hoy día funciones de 2ª Teniente alcalde de alcaldía, Economía, Vivienda, Governación y Calidad Democrática en el ayuntamiento del Prat de Llobregat".