UGT y CCOO miran al futuro de la industria del Baix Llobregat “con mucha preocupación”

La mayoría de los expertos coinciden en que la crisis del Covid-19 no tiene precedentes en el mundo desde la Segunda Guerra Mundial. En España, desde la Guerra Civil. Esta visión es compartida por los secretarios comarcales de los sindicatos del Baix Llobregat Josep Maria Romero (CC.OO) y Carlos de Pablo (UGT), que han hecho una rueda de prensa para presentar las propuestas de los trabajadores de la comarca para superar la crisis del Covid-19 de la mejor manera posible.

La situación laboral en la comarca es crítica, con 8.872 expedientes de regulación de empleo (el 93% son ERTES) que afectan a 96.600 trabajadores. Se trata de un escenario inédito para los representantes sindicales: “Durante mi vida sindical solo había estado ofreciendo apoyo en dos ERTES de fuerza mayor”, reconoce Carlos de Pablo.

“Queremos garantizar la supervivencia digna de las personas trabajadoras a través de la protección social”, explica Josep Maria Romero. El representante de Comisiones Obreras ha señalado tres sectores que consideran críticos en la comarca a consecuencia de la crisis del Covid-19: los servicios, la automoción y el Aeropuerto del Prat.

Sobre el sector de la automoción, los representantes sindicales, al ser preguntados por Vilapress, han reconocido que ven el futuro de la industria “con mucha preocupación”. Han reconocido que, antes de la crisis del coronavirus, ya era uno de los sectores más afectados debido a la “transformación tecnológica”. Sin embargo, el futuro ahora se vislumbra más oscuro, con una previsible caída de la demanda y con luchas sindicales como las de los trabajadores de Nissan. “Estaremos muy atentos, pero la buena noticia es que tenemos una gran capacidad de interlocución con el sector”, señala Josep Maria Romero, de CC.OO.

Del mismo modo, el Aeropuerto del Prat, que da trabajo a 15.000 personas, “tendrá una destrucción del empleo importante” debido a la inevitable caída del turismo, explican desde los sindicatos.

Por último, el sector de los servicios, central en la economía de Catalunya, también registrará una importante pérdida de puestos de trabajo. Además, desde los sindicatos señalan que la crisis afectará de manera más pronunciada a las mujeres que a los hombres.

El 1 DE MAYO, EN CASA PERO SIN PARAR LA LUCHA

Por razones obvias, este 1 de mayo los trabajadores no podrán salir a reivindicar sus derechos como se ha hecho año tras año. Pero esto no significa que la lucha sindical se pare. De hecho, estará más activa que nunca. “El 1 de mayo pone de manifiesto la fragilidad de un sistema económico y social que es profundamente injusto”, explica Josep María Romero.

“El día de los trabajadores no lo haremos en la calle por primera vez en mucho de tiempo”, reconoce Carlos de Pablo. El secretario comarcal de UGT en el Baix Llobregat entiende que este 1 de mayo será más importante que nunca porque, “esta crisis ha puesto de manifiesto las vergüenzas del sistema”, afirma.