La lluvia visibiliza aún más la falta de limpieza de las calles de Viladecans

Riera de Sant Llorenç. / FOTO: @lluisman

Ha llegado agosto, mes de vacaciones, sobre todo para los políticos. Gobiernos municipales, autonómicos y estatales o bien cierran o reducen jornadas a nivel considerable mientras que muchos ciudadanos siguen yendo a trabajar y/o quedándose en su lugar de residencia.

Viladecans no es una excepción. El ayuntamiento tarda en responder a las consultas ciudadanas, varios miembros del equipo de gobierno están disfrutando de grandes viajes y las calles se han quedado sin limpiar. 

Las imágenes de las aceras del municipio durante este mes de agosto están siendo las protagonistas de este verano: basura sin recoger, latas, botellas y hojas apenas dejan ver el suelo y sólo ha faltado un solo día de tormenta para que las calles ya se conviertan en un riesgo.

Los trabajadores de la limpieza hacen su trabajo como pueden pero si se les deja con un personal mínimo la naturaleza va a continuar su curso igual. Los patinazos y el riesgo de caidas por la cantidad de hojas y suciedad que existen en las calles de Viladecans.

No hay barrio casi que se salve de esta dejadez, porque no los fenómenos meteorológicos no entienden de vacaciones como si lo hacen los políticos en agosto. Ni siquiera los responsables del gobierno que se quedan de guardia han respondido a sus ciudadanos que cada día denuncian a través de las redes, como se apresuran a hacer cuando llegan a resolverlo, aunque sea tarde.

La lluvia puede ayudar a limpiar las calles, pero cuando se dejan sin limpiar durante varias semanas en pleno verano, puede complicar la situación y así ha sucedido.