La situación en Catalunya, por fortuna, se ha resuelto tras las intensas lluvias de invierno en primavera, de modo que su funcionamiento se reabre
La medida de cerrar las fuentes, acordada con todos los ayuntamientos metropolitanos, se ha tomado para que su uso comunitario aumenta el riesgo de que se contagie la enfermedad, ya que hay contacto con las manos y la boca.