VÍDEOS. La fuga de "responsables técnicos" agudizan "los errores internos" en el Ayuntamiento de Viladecans
El último informe de la interventora de Viladecans dejó al descubierto la preocupante situación de control económico en el consistorio viladecanense por falta de refuerzo de personal técnico necesario. Algo que se está uniendo a una estrategia del equipo de gobierno que está forzando una ejecución jurídica singular que ha obligado en más de una ocasión este año al secretario municipal a realizar recomendaciones jurídicas sensatas ante un desconocimiento de la normativa local del actual equipo de gobierno llamativo.
La concejala Joanna Sánchez en calidad de Vicepresidenta del Área de Presidencia y Ciudad se olvidó en la última comisión informativa de efectuar una votación de un punto que debía pasar al orden del día del pleno, como es requisito imprescindible para que este se debata y se vote . Este descuido formal ha llevado a una situación surrealista en el último pleno municipal de Viladecans y ha expuesto jurídicamente tanto a la alcaldesa como a los miembros del equipo de gobierno y a todos los concejales de ERC y Vox que participaron en esta nueva controversia reglamentaria, que se está convirtiendo en una constante.
Como consecuencia de este descuido, fruto de las múltiples tareas que ejecuta dentro de un consitorio donde se encuentran vacantes hasta siete puestos técnicos relevantes, esa consignación de pago de una factura que ya sufre un retraso de pago de cuatro años a un proveedor se dispuso en el orden del día sin que la votación por parte de los miembros de la oposición y el equipo de gobierno se hubiera realizado.
Pero es que las vacantes técnicas en el organigrama del consitorio, unidas a los déficits de personal relevante, empiezan a ser llamativas y conllevan consecuencias con un previsible difícil final. En este sentido, el último informe de la intervención municipal es demoledor, porque, entre otras muchas cosas, reconoce "deficiencias" cometidas en el área de control económico por la falta de medios técnicos y personales, ante los que ha reclamado más recursos humanos para poder ejecutar convenientemente sus funciones de fiscalización y control contable,
Sin este respaldo técnico, que podría solventarse, como comentan muchos miembros de la oposición, con ayuda externa de organismos supramunicipales que ya colaboran con el consistorio, las "deficiencias" pueden llegar a convertirse en un "buen disgusto" económico para las arcas municipales. Porque, entre otras cosas, hay unas supuestas pequeñas fugas de dinero en efectivo retirado en cajeros de las que se desconoce quién las ha efectuado, con el riesgo que dicho descontrol puede derivar si se siguen produciendo en los años todavía no auditados por la intervención local, preocupada por la deriva actual interna del consistorio.
El caso es que cuando el concejal representante del PP en dicha comisión, Fernando Moya le hizo saber al secretario del Ayuntamiento el error humano de no haberse votado un punto de la comisión que va al pleno, tras haberlo constatado con el resto de portavoces de grupos políticos, el punto se llevó al orden del día igual, incorporando una documentación donde el propio secretario "infirió y reflejó documentalmente el sentido del voto de los grupos políticos", incorporándolo y dándolo por válido hasta el día del pleno, sin que este se hubiera efectuado, como él mismo admitió en la sesión del pleno de Viladecans.
La alcaldesa de Viladecans, ERC y Vox deciden asumir el riesgo de saltarse el reglamento municipal en un pleno grabado a la vista de todos
Durante el debate de esta situación provocada por la falta de diligencia de la concejala Sánchez, el secretario del Ayuntamiento, a petición del PP, dio una explicación de lo acontecido que no contó con la satisfacción de la oposición, que además se mostró preocupada por el nuevo retraso en el pago de esta factura un mes más a un proveedor.
El Secretario admitió en el pleno que no recogió ninguna votación el día de la comisión porque ciertamente no se produjo, y que lo anotado en el acta de la propia comisión había sido una "interpretación suya". No se negó el secretario municipal, sin embargo, a aplazar dicho punto del orden del día para el pleno del mes siguiente y dejó en manos de la alcaldesa esta decisión, pero sí recogió posteriormente una votación de "supuesta comisión" que no cumplía ninguno de los requisitos formales, en el mismo pleno, para incorporar ese punto para la votación allí mismo. De esta manera, a un acta con un voto que no se produjo se unió una votación de comisión que no se convocó formalmente dentro de un pleno, añadiéndole más divergencia jurídica a este "error humano" de sencilla subsanación.
Durante la votación como "comisión improvisada" ad hoc en el pleno del mes de mayo, que no fue reconvocada pese a los requerimientos del concejal del PP, Fernando Moya que insistió en enmendar el "error humano" de la concejala Sánchez para no ahondar en ningún tipo de irregularidad documental, ERC junto al equipo de gobierno votaron a favor, Vox se abstuvo y el PP votó en contra.
Cuando llegó el momento de votar ese punto del orden del día incorporado "porque sí" en el Pleno por decisión de la alcaldesa, Olga Morales, ERC volvió a votar a favor a pesar de reconocer que no era el procedimiento correcto. El equipo de gobierno a favor, Vox se abstuvo y el PP que manifestó no querer participar en la votación, le recogieron esta afirmación como una abstención en el acta de video, por aplicación de un ROM que allí mismo se había presumiblemente vulnerado.
Cuando la concejala Sánchez quiso explicar lo sucedido en la Comisión, primero expresó que no tenía conocimiento de lo que había pasado porque "nadie se lo había comunicado" y que si era necesario posponer la votación, se hiciera. En todo caso, sin pedir disculpas de ninguna clase, afirmó que "esto no nos volverá a pasar a nadie nunca más". En un error de ejecución que ha ganado en dimensión porque "rectificar correctamente" parece ser que se ha tornado difícil en una legislatura a medias.
Así de esta manera, un acto jurídico local en Viladecans de dudosa legalidad se llevó a cabo en el pasado pleno del mes de mayo por el poder de la alcaldesa de presidirlo sin tener en cuenta ninguna ulterior consecuencia para los que participaron en esta chapuza política local.
Las normas, las leyes y su correcto cumplimiento en el ejercicio público ha quedado para foto fija en este pleno de Viladecans, desde cuya hemeroteca será caso de estudio singular.
¿Tomará medidas jurídicas el grupo municipal del PP ante este presunto incumplimiento reglamentario documentado?
VIDEO DEL DEBATE SOBRE ESTE PUNTO DEL ORDEN DEL DÍA
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