Illa inaugura el carril bus de la B-23 que permitirá ahorrar 15 minutos de trayecto desde el Baix Llobregat

El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha inaugurado este sábado en Sant Just Desvern (Barcelona) el nuevo carril bus de la carretera B-23, una infraestructura que ha definido como un "ejemplo de colaboración" entre el Gobierno, la Generalitat y los municipios implicados.

El nuevo carril exclusivo para transporte público abarca 7,2 kilómetros de la B-23, desde su conexión con la autovía A-2 en Sant Feliu de Llobregat hasta su intersección con las avenidas Diagonal y Bastardas en Barcelona, atravesando Sant Joan Despí y el propio Sant Just Desvern.

Illa ha destacado las mejoras en términos de eficiencia y reducción de tiempo, subrayando que este carril beneficiará a más de 700 autobuses diarios, permitiendo un ahorro de hasta 15 minutos en el trayecto. Esta medida se adopta en una vía que en hora punta llega a soportar hasta 98.000 vehículos de movilidad privada.

Esta actuación se enmarca en las políticas de impulso a la movilidad sostenible y a la mejora del transporte público en el área metropolitana de Barcelona.

Lo ha definido como una apuesta por el transporte público y la movilidad sostenible, porque el carril "da prioridad al transporte colectivo para poder llegar a Barcelona, con ganancia de tiempos y de eficiencia".

Es una inversión de 20,8 millones de euros procedentes del fondo europeo Next Generation EU, canalizados por el Ministerio de Transporte (el Estado es titular de la B-23) y ejecutados por la Generalitat, y el traspaso de la infraestructura del Estado a la Generalitat se formalizará en otoño.

Illa ha explicado que esta inauguración es sólo una "cata" de los trabajos de mejora en la red catalana de movilidad en la C55, en el Aeropuerto de Barcelona y con la reciente puesta en marcha de la terminal de Hutchinson Best en el Puerto de Barcelona.

Además ha destacado que están trabajando en el Eix Pirinenc, la Ronda Nord y la conectividad de la A2 y la AP7, los tres sumando una inversión de casi 900 millones de euros.

DAVID PRAT
El director general de Infraestructuras de Movilidad de la Conselleria de Territorio, David Prat, ha celebrado que la rentabilidad socioeconómica de esta infraestructura es del 30%, recalcando que una rentabilidad ya se considera positiva cuando llega al 3%.

Ha hecho hincapié en el objetivo de la construcción de este carril bus que empezó en marzo de 2023: hacer que la gente utilice el transporte público y "deje el coche en casa".

MOVILIDAD Y SOSTENIBILIDAD
El Govern lo enmarca en la voluntad de reducir el vehículo privado en el área metropolitana de Barcelona mejorando el transporte público: en el caso de este carril, se favorece al bus interurbano además del tranvía, el Metro y otras redes de bus urbanas, y se calcula un ahorro en emisiones de 34 toneladas de CO2 anuales.

La obra es un carril exclusivo para bus en sentido Barcelona aprovechando parte del espacio de la mediana de la B-23; tiene 3,5 metros de ancho; está a la izquierda de los carriles de circulación sentido Barcelona; los buses pueden acceder en cualquier punto a lo largo del recorrido, y se ha mantenido el número de carriles de circulación (2 ó 3 según el tramo).