¿Promueve la Asociación de Municipios por la Independencia un nuevo 1-O municipalista?

El Auditorio-Palau de Congressos de Gerona acogió el I Encuentro Nacional de Electos Locales “Catalunya 2025”, organizado por la Asociación de Municipios por la Independència (AMI) junto a los ayuntamientos de Girona, Manresa y Vic. La jornada reunió a más de 180 alcaldes y concejales de toda Catalunya con la finalidad de relanzar el municipalismo como herramienta esencial para la construcción nacional y la defensa de la soberanía catalana.

Con la adhesión de 800 de los 947 ayuntamientos catalanes, la AMI reclama a los consistorios la creación de ‘consellerias’ de políticas lingüísticas y parece ser que la activación de mecanismos para “repetir el 1-O y el 3-O” a escala local, encendiendo nuevamente el debate sobre el papel del municipalismo en la construcción nacional. Y el de los municipios es “crear las condiciones para un nuevo desafío democrático”. 

El documento recuerda que las consultas municipales iniciadas en Arenys de Mar (2009) y el respaldo local a la jornada del 9-N (2014) y al referéndum del 1-O (2017) constituyeron ejemplos de “desobediencia institucional” que “movilizaron a la ciudadanía desde los pueblos y ciudades”.

El manifiesto redactado en Girona incluye dos ejes

Por un lado, el manifiesto promueve la creación de ‘consellerias’ lingüísticas municipales. En este sentido, los ayuntamientos adheridos a la AMI deberán impulsar departamentos locales cuya misión sea “impulsar el catalán”: desde subvenciones a actividades culturales en catalán hasta programas de apoyo lingüístico en escuelas y servicios públicos locales. Con ello, la asociación pretende que el catalán  se convierta en “baluarte imprescindible de la identidad nacional” allá donde el consistorio tenga competencias.

Por otra parte, llaman a la movilización de cargos electos para una “nueva construcción nacional”. La AMI ha pedido que todos los alcaldes y concejales independentistas participen activamente en “iniciativas sociales y culturales que preparen un nuevo embate democrático contra el Estado”. Entre las propuestas figuran encuentros vecinales, recogida de apoyos para futuras consultas y campañas de sensibilización sobre “las limitaciones a las libertades que impone el ordenamiento español en Catalunya”.

El Presidente de la AMI cree que la mayoría de municipios respalda su propuesta

Durante el acto inaugural, el alcalde de Girona, Lluc Salellas, subrayó que “no hay ninguna otra administración que reme para que Catalunya pueda construir su futuro de libertad” y destacó el papel activo de los gobiernos locales en este proceso. A su turno, el segundo teniente de alcalde de Girona, Quim Ayats, insistió en que “el municipalismo ha tenido un papel clave y debe continuar siéndolo para construir un país que no deje a nadie atrás”. La vicealcaldesa, Gemma Geis, añadió que “el latido del mundo municipal es esencial en la creación de un proyecto colectivo” y apeló a la “generosidad política desde miradas y mochilas diferentes”.

El presidente de la AMI, Jordi Gaseni, valoró la asociación como “una herramienta poderosa formada por quienes estamos más cerca de la ciudadanía” y definió el municipalismo como “una pieza fundamental que debemos mantener fuerte, preparada y ágil”. En su intervención hizo un llamamiento a los electos: “Sois elegidos para defender un anhelo de libertad que debe renacer de donde aún conservamos brasas y leña, para que, cuando llegue la oportunidad, todo esté preparado en cada pueblo y ciudad”.

La conferencia inaugural corrió a cargo de Lluís-Esteve Casellas, archivero municipal de Girona, quien recordó que “el patrimonio documental de Catalunya es uno de los más importantes de Europa”. Casellas explicó que los archivos municipales desempeñan un papel esencial para “garantizar el acceso a la información de forma fiable y oportuna”, y sirven como base para preservar la memoria histórica y construir identidades colectivas.

Mesa 1: Retos del municipalismo en clave nacional

La primera mesa redonda reunió a alcaldes de Girona, Manresa, Vic, Agramunt e Isona i Conca Dellà, quienes compartieron las principales líneas de trabajo para fortalecer el municipalismo como motor de transformación social y política.

Lluc Salellas (Girona) destacó cuatro ejes estratégicos: reforzar espacios de cohesión, desplegar políticas de resistencia cultural, defender la soberanía local y nacional, y trabajar una estrategia municipalista de abajo hacia arriba.

Marc Aloy (Manresa) reivindicó “leer lo ocurrido en los últimos años para volver a generar confianza” y reconstruir el independentismo desde el municipalismo, subrayando el papel de la lengua como herramienta de cohesión.

Albert Castells (Vic) incitó a la cooperación entre municipios con unidad de objetivos: “El mundo local es la administración más cercana al ciudadano, y debe adaptarse para afrontar los retos actuales y evitar la dilución de la nación. Ahora toca querer la lengua para defender el país”.

Sílvia Fernàndez (Agramunt) señaló que “desde el municipalismo se construyen relaciones de confianza que permiten emprender un nuevo embate”.

Jeannine Abella (Isona i Conca Dellà) defendió que “cada decisión local debe hacerse pensando en acercarnos a la independencia. La unidad del municipalismo independentista nos llevará a lograr la libertad nacional”.

Mesa 2: Ejemplos prácticos de soberanía local

En la segunda mesa, electos y expertos de Sant Cugat del Vallès, Amposta, Valls, Palamós, Cornellà del Terri y la Asociación de Municipios explicaron proyectos concretos ligados a la soberanía en ámbitos diversos:

Sant Cugat del Vallès: Núria Fernández (regidora de Política Lingüística) defendió que “la política lingüística no es algo accesorio, sino central. Hay que garantizar que todo el mundo pueda vivir plenamente en catalán y defenderlo con acciones, no solo con emociones”.

Amposta: Núria Ferré (regidora de Derechos Sociales y Ciudadanía) narró el proceso de recuperación de vivienda pública tras la creación del servicio de alquiler social, que recibió más de 200 solicitudes, y destacó que “gestionar el derecho a la vivienda es difícil, pero imprescindible para evitar considerarlo un derecho vulnerado”.

Valls: Joan Ibarra (concejal de Turismo) subrayó el valor de la cultura popular: “Los castells son un eje vertebrador social y una expresión transversal de país, de valores, lengua y tradiciones. En momentos en que quieren des-nacionalizarnos, elementos como los castells o la calçotada se convierten en ejes de transmisión social”.

Palamós: Maria Puig (regidora de Patrimonio Marítimo, Patrimonio Local, Medio Ambiente y Salud Pública) presentó el modelo Palamós Peix, basado en la soberanía alimentaria: “Poner el territorio por delante nos hace más fuertes. Democratizar el acceso al pescado fresco es cuidar el país y a las personas y nos permite ser más soberanos”.

Cornellà del Terri: Francesc Pujol (asesor de comunidades energéticas locales) destacó las comunidades energéticas: “Hacemos la transición energética para todos. La soberanía energética no depende del tamaño del municipio, sino del compromiso de la ciudadanía”.

Impacto en el día a día de los consistorios

Desde el Ayuntamiento de Olot, la alcaldesa Marta Serra (ERC) anunció que está preparando la creación de una nueva regiduría de Política Lingüística que coordinará talleres de inmersión en catalán para personal municipal, cursos gratuitos para comerciantes y la adaptación de todos los trámites administrativos.

 “Queremos que hablar en catalán sea tan normal en la calle, en el comercio o en los servicios sociales como hacerlo en casa”, explica Serra, que prevé destinar hasta un 15 % del presupuesto municipal a este área durante 2025.

En municipios del interior, como La Seu d’Urgell, el equipo de gobierno (Junts) avanza en la formación de un consejo de asesores lingüísticos que trabajará mano a mano con centros educativos y entidades culturales. “Nuestra prioridad es que las escuelas de montaña no pierdan ni una sola hora de catalán, y que las actividades extraescolares se realicen en la lengua propia de la región”.

Varios alcaldes del Área Metropolitana de Barcelona han puesto en duda la viabilidad de las "consellerias lingüísticas"

Pese a la euforia inicial, no todos los consistorios se muestran dispuestos a dar este paso. Varios alcaldes del área metropolitana de Barcelona han expresado sus dudas sobre la viabilidad de ‘consellerias’ lingüísticas municipales, dado el coste económico y la posible fricción con los gobiernos supramunicipales (Diputaciones y Generalitat). Fuentes de hasta cinco ayuntamientos mayores de 20 000 habitantes señalan que aún deben evaluar la carga administrativa que implica crear un servicio propio de competencia estrictamente estatal o autonómica.

Ante estas propuestas, municipios de la comarca del Baix Llobregat deberán posicionarse también. En este sentido forman parte de la AMI municipios como Begues, Castelldefels,,Castellví de Rosanes, Collbató, Corbera de Llobregat, El Papiol, La Palma de Cervelló, Martorell, Molins de Rei, Olesa de Montserrat, Pallejà, Sant Climent de Llobregat, Sant Esteve Sesrovires, Sant Just Desvern, Sant Vicenç dels Horts, 

Santa Coloma de Cervelló y Torrelles de Llobregat.

Cordón sanitario a Aliança Catalana en la AMI

Uno de los aspectos más controvertidos del Encuentro de Girona ha sido el veto explícito a los cargos municipales vinculados a la emergente Aliança Catalana. En vistas a las elecciones municipales de 2027, varios sondeos internos indican que la formación ultraderechista podría arrebatar entre 7 y 8 puntos a Junts en las comarcas del interior, captando el voto “anti-inmigración” y “antiespañol” de sectores rurales más conservadores.

El pasado verano, la Aliança Catalana ya rompió lazos con la AMI cuando la asociación declinó apoyar la retirada de una estelada en Ripoll. Desde entonces, las relaciones son prácticamente inexistentes. “No queremos a quien promueva el odio ni a quien no quiera integrarse en nuestro proyecto”, alegó la AMI en el encuentro. Esa decisión hirió sensibilidades en varios municipios del interior, donde ediles de Aliança han comenzado a explorar fórmulas de colaboración alternativa con asociaciones vecinales y entidades culturales ajenas al paraguas de la AMI.

En Ripoll, donde la Aliança logró tres concejales en 2023, el portavoz del partido, Oriol Mas, advirtió que “el veto nos obliga a buscar aliados fuera de los circuitos oficiales. El rechazo de la AMI no detendrá nuestro avance: somos la única opción en muchos pueblos donde el independentismo tradicional ha fracasado en ofrecer soluciones a la crisis demográfica y la despoblación”.

Reacciones ciudadanas y perspectivas de futuro

A pie de calle, el ecosistema municipalista experimenta sensaciones encontradas. En pequeños núcleos de montaña —como Sant Joan de les Abadesses o Tremp—, asociaciones vecinales se preparan para impulsar charlas y debates sobre cómo “defender la lengua y los servicios básicos” frente a lo que llaman “la regresión del Estado español”. En contraposición, en barrios obreros de ciudades como Badalona o l’Hospitalet, colectivos vecinales recuerdan que “la prioridad hoy es la vivienda, el transporte público y los servicios sociales”, y critican que “estos giros independentistas descuidan lo que verdaderamente preocupa a la gente de a pie”.

Preguntado en Balaguer (La Noguera) por la prensa local, el alcalde Jordi Torra (PSC) advirtió que “la imposición de políticas lingüísticas exclusivas puede generar un agravio comparativo para quienes no dominan el catalán. Manejamos un presupuesto ajustado y no podemos abrir una conselleria nueva sin ver antes si hay competencias y recursos suficientes”. Mientras tanto, en el Baix Penedès, el Consell Comarcal prepara una reunión de urgencia para analizar cómo la AMI pretende involucrar a los gobiernos locales en nuevas movilizaciones, y si cabe plantear alianzas supramunicipales para garantizar la neutralidad de servicios como transporte, turismo o desarrollo económico.

Desafío o desgaste: el voto rural dictará el pulso municipal

A menos de dos años de las elecciones municipales de mayo de 2027, la influencia de la AMI en el municipalismo queda en entredicho por la irrupción de la Aliança Catalana y por el desgaste propio que genera la ampliación de competencias a los ayuntamientos sin una hoja de ruta presupuestaria clara. 

Los expertos coinciden en que, si la Aliança se consolida en la Catalunya interior, la AMI podría empezar a perder municipios clave, mermando su capacidad de convocatoria. Sin embargo, si los independentistas tradicionales (Junts, ERC, CUP) logran mantener el tipo en capitales como Barcelona, Girona, Tarragona y Lleida, el pulso municipal seguirá inclinándose hacia la desobediencia institucional.

Para el tejido asociativo local, el reto es doble: por un lado, adaptarse a la presión para impulsar ‘consellerias’ lingüísticas sin desatender las necesidades más urgentes de la ciudadanía (empleo, servicios sociales, sostenibilidad); por otro, gestionar la convivencia política con sectores que promueven discursos más radicales. “Los ayuntamientos deben equilibrar la reivindicación nacional con la gestión cotidiana de infraestructuras y servicios. Si no, corren el riesgo de trasladar la batalla ideológica a reuniones plenarias y despachos, mientras la gente sufre recortes en la recogida de basuras o en el transporte interurbano”, reconoce Jordi Martínez, profesor de Ciencias Políticas de la UAB.

Nuevo ciclo político eon el municipalismo

La aprobación del manifiesto de la AMI en Gerona marca el inicio de un nuevo capítulo en el municipalismo catalán: los consistorios ya no se limitan a permitir actos de apoyo al referéndum, sino que se convierten en actores activos para fomentar el monolingüismo en catalán y preparar “nuevos desafíos democráticos”. 

Sin embargo, el vetar a la Aliança Catalana y las dudas sobre financiación y competencias dejan patente que las tensiones internas dentro del independentismo seguirán condicionando el destino de muchos ayuntamientos. 

En los próximos meses, la manera en que alcaldes y concejales equilibren la reivindicación nacional y la gestión local —sin olvidar las demandas sociales básicas— determinará si el municipalismo catalán se consolida como fuerza de transformación o acaba atrapado en disputas internas que debilitan su proyecto también en la comarca del Baix Llobregat.

Lectura del “Acord Municipalista Catalunya 2025”

La jornada concluyó con la lectura del manifest “Acord Municipalista Catalunya 2025”, a cargo de las alcaldesas Margarida Feliu (Viladrau), Ester Vallès (Vilobí del Penedès) y Dolors Pons (Viladamat). Este acuerdo reivindica el papel de los ayuntamientos como actores principales para establecer una agenda propia en materia cultural, lingüística, social y económica, y constituye una muestra del amplio respaldo del mundo local al proceso de soberanía. El acto finalizó con la interpretación de “Els Segadors”, himno oficial de Catalunya.

Con este encuentro, la AMI y los ayuntamientos participantes han sentado las bases para que el municipalismo catalán se convierta en una palanca estratégica, que a través de políticas de proximidad y soberanía —en transporte, vivienda, energía, cultura y lengua— refuerce la construcción de un proyecto nacional desde los pueblos y ciudades.

Lee el manifiesto en la AMI: https://www.municipisindependencia.cat/wp-content/uploads/2025/05/manifest-maquetat-x-imprimir.pdf