Se les acusa de desviar dinero de fondos públicos para financiar la estructura montada por Carles Puigdemont en Waterloo
En Catalunya, los dirigentes y sus acólitos continúan justificando los actos vandálicos e incívicos de quienes se han apoderado de las calles.
La anormalidad de apropiarse de una vía tan importante se ha convertido en "normalidad" bendecida por quienes debe velar para que se cumpla la ley.