El Can Vidalet buscará reencontrarse con la victoria ante el Mollerussa

El CF Can Vidalet encara una nueva jornada de Tercera Federación con la sensación de estar en el camino correcto, aunque los números todavía no lo reflejen. Los de Fran Rubio han demostrado ser un equipo incómodo para cualquiera, capaz de competir con intensidad y coraje frente a rivales de peso, pero aún les falta dar ese paso definitivo que convierta las buenas sensaciones en puntos.

Después de nueve jornadas de liga, el conjunto de Esplugues de Llobregat ocupa la duodécima posición en la tabla con 9 puntos, un colchón prudente que les mantiene alejados de la zona de descenso. Hasta el momento, su balance es de dos victorias, tres empates y cuatro derrotas, una muestra de la irregularidad que caracteriza su inicio de curso.

Un duelo clave ante un rival herido

Este domingo, el Can Vidalet tiene una oportunidad de oro para volver a sumar de tres. El domingo, a partir de las 12 horas, visitará el campo del CF Mollerussa, un rival que atraviesa una situación delicada y que todavía no conoce la victoria en la categoría. Con solo cinco puntos en su casillero, el equipo ilerdense ocupa la penúltima posición de la clasificación, un dato que sobre el papel convierte el duelo en una ocasión ideal para sumar tres puntos vitales.

Otro de los datos a tener en cuenta es que los de Esplugues de Llobregat han sumado la gran mayoría de sus puntos como visitantes.

Un equipo con gol… y margen de mejora

Más allá de los resultados, el Can Vidalet ha dejado claro que tiene argumentos ofensivos para mirar hacia arriba. Los espluguenses generan ocasiones, compiten bien y tienen gol, aunque deben mejorar su solidez defensiva para evitar que los rivales siempre consigan generar peligro y perforar la portería arlequinada.

El cuerpo técnico insiste en la importancia de mantener la identidad y la intensidad que el equipo ha mostrado en las últimas jornadas. Si consiguen ajustar detalles atrás y aprovechar las oportunidades arriba, el Can Vidalet puede empezar a mirar con optimismo una temporada que todavía ofrece mucho margen para crecer.

Objetivo: seguir sumando

La visita a Mollerussa se presenta, por tanto, como un punto de inflexión. Una oportunidad para reforzar la moral del grupo y confirmar que, más allá de las sombras del inicio, el proyecto de Fran Rubio tiene bases sólidas. Competir ya no basta; ahora toca ganar.