Más de dos meses con una carretera cortada por unos palos de teléfono

La carretera que conecta Sant Just Desvern con el barrio de Vallvidriera de Barcelona, conocido como el camí de la Muntanya, lleva ya casi tres meses cerrado al tráfico por las noches (de 22 a 9:30 horas), y eso que a finales de 2018 el problema debería haber estado resuelto.

Las razones de estos cortes son los antiguos postes de teléfono que aún van quedando en algunas partes del territorio y que en el caso de esta carretera están empezando a ceder y se encuentran muy cercanos a la calzada. Esto presenta un riesgo de seguridad porque están en medio del camino, admiten desde el ayuntamiento.

El consistorio ha reconocido que se avisó a la compañía constructora de los trabajos y a la encargada de la red telefónica para solventar el problema a principios de enero, cuando empezaron los cortes, y estos les prometieron que el 31 de diciembre ya estaría todo corregido.

Nada de esto ha pasado y la empresa constructora y las empresas de suministro aún han de tramitar la documentación necesaria para retirar los postes telefónicos. Una documentación que aún no se ha entregado en casi tres meses.

El ayuntamiento recuerda que la empresa constructora se ha encargado de ponerse en contacto con la compañía de suministro telefónico. El problema es que la telefónica se justifica diciendo que ha cambiado la empresa que tienen subcontratada para realizar estos trabajos en los últimos meses y todo se ha ido retrasando.

Hasta que esto no suceda, el ayuntamiento de Sant Just ha anunciado que mantendrá la carretera cortada durante las noches, permitiendo el acceso a las fincas particulares. Asimismo, en horario diurno, el tráfico puede circular con normalidad para garantizar la actividad comercial.