Al final los socialistas cogieron la directa, pactaron con el PP y con otras formaciones políticas, y han sacado la reforma de la ley.
La encuesta, que no ofrece estimación de escaños, sitúa los comunes en cuarta posición con el 8,9%, seguido de Cs con el 7,9%, la CUP (6,9%), el PP (5,8 %) y el PDeCAT se quedaría fuera de Parlamento al obtener un 1,5%.
Lo razonable es que aquí y ahora se formara un Gobierno a la alemana con socialdemócratas y derecha civilizada, un gabinete con fortaleza parlamentaria suficiente para los cuatro próximos años que enderezara la inestabilidad política.
Una buena comisión técnica independiente nos dejaría a todos más tranquilos pensando que aquí nadie es responsable de un fraude.
De momento, la única verdad es que los ciudadanos no se comprometen ya con nadie, y que la mayoría absoluta ha pasado a mejor vida.